Ésta página Web, que marca el precio del dólar paralelo ( precio
no fijado por el Banco Central) en la República Bolivariana de Venezuela, viene
a ser, sin duda, una plaga muy perjudicial para el País, no es un secreto para
nadie que el precio impuesto en ella se hace al libre albedrío de quienes la
manejan, con el pretexto de las transacciones realizadas en la frontera
Colombo-Venezolana. Estos personajes hacen un negocio redondo con el precio de
la Moneda Estadounidense al bajarla de precio para que sus secuaces puedan
comprar en el mercado negro a un valor menor y luego subir el mismo para que
vendan con ganancias exorbitantes. Los venezolanos estamos adormecidos ante esto,
al parecer no reparamos en el daño que nos hace las transacciones en éste
mercado, no a los que poseen grandes recursos económicos, sino a los más
débiles en éste rubro, la gente trabajadora y desempleada.
Es fácil ver en comercios productos con un costo elevadísimo y al
preguntar al encargado el porqué de ese valor tan alto, te diga sin ningún
escrúpulo que es porque el dólar paralelo está a cierto precio, pero si al otro
día ése marcador web fija el precio a la mitad, el mismo producto no baja su valor, sino que se mantiene o sube.
Así mismo miles de Venezolanos que cruzaron la frontera en algún
tiempo para canjear su cupo en dólares comprados a 6 bolívares, para luego
regresar al país y venderlos a un precio hasta diez veces su valor, nunca
imaginaron que estaban abriendo las puertas a una inflación que ahora nos
aqueja y nos hace estar padeciendo una crisis sin precedentes, aparte de las
pocas políticas implementadas por el Gobierno en relación a la producción de
bienes y servicios en los últimos años que nos están llevando a padecer de una
aguda escases de productos alimenticios y aseo personal.
Por otra parte la desmesurada politización de las actividades
normales de los habitantes hace un clima perfecto para quienes buscan beneficios
personales, en detrimento de la mayoría.
Si los venezolanos no reflexionamos y comenzamos a realizar las
cosas necesarias para enderezar el camino que en algún momento perdimos, estaremos
destinados a tener varios años en crisis, echándonos la culpa los unos a los
otros cuando en realidad todos somos
parte del problema.